Tirada de Tarot de la Herradura

La herradura – una tirada para todo momento

El Tarot se hace presente una vez más para traerte una tirada sencilla, concisa y que puede ser realizada en cualquier momento. No debes preocuparte del orden de las cartas, ya que este es natural e intuitivo, mientras que la interpretación es muy accesible. ¿La exploramos juntos?

Cómo realizar la tirada de la herradura

Arcanos: lo mejor es hacer esta tirada con todos los arcanos, ya que son muchas más las opciones de respuesta que tendremos con ellos. En el caso de que solo te manejes bien con los mayores, también puedes optar por trabajar solo con los veintidós principales. Hay determinados Tarots, tal como el egipcio o el gitano, que cuentan con arcanos muy valiosos más allá de los mayores, por eso es que recomendamos usarlos todos.

Barajar y cortar: mientras barajas, es imprescindible concentrarte en la situación acerca de la que estás consultando. Trata de visualizarla y de pedirle a los arcanos que abran tu visión para que puedas comprender lo que sea necesario que entiendas y para que te sea posible hallar la solución. Cuando estés listo, corta el mazo.

Distribución de las cartas: tal como dice su nombre, las cartas formarán una herradura cuya curva queda abajo y sus dos extremos hacia arriba. Sacas del montón siete cartas y las colocas en esa forma desde la izquierda hacia la derecha.

Interpretación de la tirada de la herradura

  • Carta uno – pasado: nos remite al pasado de la situación y nos da las pautas para entender cómo fue que toda esta situación se generó. Si bien en el pasado no está la solución, sí está la clave para prevenir que se vuelva a formar cuando la hayamos resuelto. En esta baraja se nos revelan hechos que nos sorprenderán notablemente debido a haberlos desconocido hasta entonces.

 

  • Carta dos – relación: se trata de la relación que el consultante tiene con la situación. Algunas veces es tan cercana como ellos dicen, mientras que en otras oportunidades el problema no lo toca tan de cerca como cree. Aquí el rol del tarotista es fundamental, puesto que podrá alertar o calmar al consultante para que aborde el problema con presteza o para que pueda delegarlo si no le afecta tanto como pensaba.

 

  • Carta tres – futuro: nos pinta un panorama de cómo evolucionará esta situación. Es un cuadro que nos muestra aquello que ahora ni se nos ocurre imaginar.

 

  • Carta cuatro – solución: es el consejo que nos llevará a solucionar el problema. Por ejemplo, si nos sale la carta de El Diablo, tendremos que luchar mucho para conseguir lo que queremos, tanto a nivel intelectual como espiritual. Esta carta nos marca el camino a seguir.

 

  • Carta cinco – entorno: sabremos quiénes están a nuestro favor y quiénes secretamente están haciendo lo posible para que fracasemos en este emprendimiento.

 

  • Carta seis – obstáculos: sabremos todo lo que nos amenaza y lo que hace la fuerza opuesta de la que nosotros necesitamos para eliminar el problema.

 

  • Carta siete – resultado final: esta es la carta que nos mostrará lo que terminará pasando al final del proceso. Todo es evitable, pero debes seguir los consejos de la carta cuatro.