Mitología egipcia para conocerte mejor
Si piensas en belleza, alegría, danza, música, femineidad y maternidad, entonces puedes resumirlo en una sola palabra: Hathor. Conoce a Hathor y adéntrate en el mundo mitológico egipcio y sé parte de una comunidad que cada día más se interesa en conocer los orígenes de una mitología que, como tarotistas, nos ayuda a brindar una mejor consulta y predicción a futuro.
Por otra parte, como personas nos da las herramientas para comprender más acerca del mundo que nos rodea y, por consiguiente, nos pone en condiciones de comprender más acerca de nosotros mismos.
Quién es Hathor y cuál es su influencia
- Una diosa muy venerada: Hathor ha sido asociada a todos los aspectos de la vida y de la muerte de las personas, tan vasto es su alcance. En el Antiguo Egipto, Hathor era la diosa a la que más festivales se le dedicaba, y no solamente en Egipto, sino que su influencia y adoración se expandía a Nubia, Libia, Etiopía y Somalía.
- La leche que a todos nutre: su origen está vinculado a Vía Láctea. Ya desde sus comienzos se le habían atribuido dones personificados, resaltando así la importancia que tenía para la humanidad. Se la consideraba la leche que fluía de una ubre celestial, de este mito es que se la representa con un par de cuernos de vaca.
- Una parte de otras diosas: más adelante, Hathor va absorbiendo cualidades de muchas otras diosas, hasta que finalmente se convierte en lo que hoy en día es, una de las diosas más importantes en la mitología egipcia. Su brillo era tal que se la asoció con la estrella más brillante vista desde la Tierra: Sirio. Gracias a ello, se la conocía como la «Dama de las Estrellas».
- La diosa de la maternidad: En lo que respecta a la maternidad y la femineidad, era la diosa de los partos y asistía a las futuras madres en esta difícil labor. También era la protectora de los niños recién nacidos. Las mujeres le encomendaban todos sus problemas, desde las dificultades para concebir, el embarazo en sí, el parto, como también las cuestiones más triviales como la belleza o el mal de amores. Por ello, por ser la madre de las madres, era también venerada por los sacerdotes tanto como por las sacerdotisas.
- La diosa del placer: al mismo tiempo, Hathor era denominada La Amante de la Vida, por lo que todos los aspectos relacionados a los placeres terrenales eran encomendados a ella: la música, las fiestas, las celebraciones, la danza. En especial era asociada al sistro, instrumento de percusión cuya forma le mereció se asociado a la fertilidad.
La parte destructiva de Hathor
Cuenta la leyenda que Ra, dios de los dioses, del sol, del cielo y del origen de la vida, comenzó a ser severamente criticado por el pueblo cuando se convirtió en faraón. Su venganza no se hizo esperar y envió a la humanidad su ojo, el cual recibió el nombre de Sekhmet, la gata vengadora y devoradora de seres humanos que, para defender al dios de dioses, se convirtió en el símbolo de la furia y la destrucción sobre la faz de la Tierra.
